Foster Gillet no aparece y la plata que prometió tampoco. River permitió que Rodrigo Villagra dejara de entrenar con el plantel ante una supuesta inminente venta que no llega y hace 23 días que el futbolista no forma parte del equipo, pese a que su ficha sigue siendo del club de Núñez.

La desprolijidad del grupo empresario que lleva el nombre del magnate norteamericano ya se está transformando en escándalo, porque además circularon por las redes sociales imágenes del jugador entrenando solo en medio de la calle.

Villagra atraviesa un momento de profunda frustración y según fuentes cercanas al jugador, su paciencia se ha agotado debido a la falta de avances. La frase textual que expresaron desde su entorno fue "se hinchó los huevos". El futbolista ya no está dispuesto a esperar en un limbo indefinido y ha establecido un plazo para resolver su situación.

River había alcanzado un preacuerdo para vender su pase por 10 millones de dólares netos, pero el dinero no apareció.Tanto el presidente de River, Jorge Brito, como el secretario general, Stéfano Di Carlo, han salido a responder públicamente.

Gillett ingresó al fútbol argentino de la mano de Estudiantes y su presidente, Juan Sebastián Verón. De hecho, en el Pincha esperan el dinero para pagar el pase de Ezequiel Piovi a Liga de Quito. Sumado al dinero que todavía no le pagaron a Vélez por Valentín Gómez, el grupo inversor tiene esperando a tres clubes importantes por un monto de 25 millones de dólares.

Un ultimátum con fecha límite
El fin de semana es la fecha tope que Villagra ha fijado para que se concrete su salida de River. La razón es clara: el domingo 23 de febrero es el último día en la mayoría de las ligas europeas para registrar jugadores libres, condición que podría aplicar al futbolista si no se resuelve su transferencia. Sin embargo, según reveló el empresario Guillermo Tofoni, cercano al grupo inversor, el caso de Villagra no parece ser una prioridad para Gillett.

El magnate estadounidense tiene otros compromisos financieros que atender antes de destinar fondos a la operación de Villagra. En primer lugar, planea destinar recursos a Vélez Sarsfield para facilitar la transferencia de Valentín Gómez al Udinese. Luego, cumpliría con la promesa hecha a Estudiantes para que el club pueda moverse en el mercado de pases.

Recién después de eso, se ocuparía de la rescisión de Villagra, quien lleva 20 días entrenando por su cuenta, fuera de River y sin un destino claro.

Opciones limitadas y un futuro incierto
Si la operación con Gillett no se concreta, Villagra podría explorar otras alternativas. Santos de Brasil y el CSKA de Moscú ya han expresado su interés en el mediocampista. Sin embargo, la opción rusa se ha descartado debido al cierre del mercado de pases en ese país el 20 de febrero. Para River, la única posibilidad de que Villagra sea cedido al extranjero sería mediante la venta de un porcentaje de su pase, ya que el club ya ha alcanzado el límite de seis jugadores prestados al exterior.

Mientras tanto, el club de Núñez no muestra prisa por resolver la situación. Desde el club saben que el problema, en primera instancia, es del jugador, a quien el entrenador Marcelo Gallardo ya no tiene en cuenta para sus planes deportivos. Además, confían en que ningún otro comprador podría igualar la oferta de Gillett, quien, hasta ahora, ha prometido más de lo que ha cumplido.

En resumen, Rodrigo Villagra se encuentra en una encrucijada. Su futuro depende de la voluntad de un inversor que parece tener otras prioridades, mientras el reloj avanza y las opciones se reducen. El mediocampista, lejos de los entrenamientos del Millo, espera una solución que le permita retomar su carrera en un nuevo destino.

Cabe recordar que River le pagó a Talleres de Córdoba 10 millones de dólares por Villagra a mediados del año pasado. La dirigencia que encabeza Brito hace intentos para desprenderse de responsabilidades, pero también es responsable de la situación.

De hecho, lo más probable es que el jugador vuelva a entrenar con el plantel la semana que viene si su situación no se resuelve.