La Confederación General del Trabajo (CGT), una organización sindical de gran influencia en Argentina, ha decidido endurecer su postura y unirse a la marcha al Congreso en protesta por los vetos presidenciales. Esta decisión representa un cambio significativo en la actitud de la CGT, que hasta ahora había mantenido una postura más moderada.

La CGT ha expresado su descontento con las políticas actuales del gobierno, en particular con los vetos presidenciales que considera perjudiciales para los trabajadores. La participación de la CGT en la marcha al Congreso es vista como una señal de que la organización sindical está dispuesta a tomar medidas más decisivas para defender los derechos de los trabajadores.

No obstante, se espera que la CGT mantenga un diálogo constructivo con el gobierno, a pesar de su postura más crítica. La organización sindical ha destacado la importancia de mantener vías de comunicación abiertas con las autoridades para poder negociar soluciones que beneficien a los trabajadores. De hecho, la participación de la CGT en la marcha es vista como un intento de presionar al gobierno para que reconsidere su postura sobre los vetos presidenciales.

En conclusión, la decisión de la CGT de unirse a la marcha al Congreso es un claro indicativo de que la organización sindical está dispuesta a intensificar su lucha contra los vetos presidenciales. Sin embargo, también refleja el deseo de la CGT de seguir trabajando con el gobierno para encontrar soluciones a los problemas que enfrentan los trabajadores.